Gameiro, un hat-trick para la reivindicación

El Atlético de Madrid ganó en Gijón el día en que por fin explotó Gameiro. Ha necesitado seis meses para ser el delantero que se vio en Sevilla, rápido, listo en el área, letal ante la portería rival. El jugador francés sólo llevaba seis goles hasta ahora, no marcaba desde noviembre y logró un hat-trick. Uno de los más rápidos en la historia de la Liga puesto que los metió en cinco minutos. Y eso que fue suplente un día más. La cuarta plaza está asegura una semana más.

Los rojiblancos que hoy vistieron de negro y amarillo, estaban jugando un nuevo partido donde volvían a aflorar las dudas. El centro del campo no funcionaba, el Sporting se crecía ante sus continuas acometidas sobre el área de Moyá y los delanteros no generaban ocasiones claras de gol. Torres, que volvió a ganar la batalla de la titularidad a Gameiro, no tuvo una buena mañana y acabó siendo sustituido por el francés. Y ahí cambió todo.

Lo cierto es que Gameiro atravesaba su peor racha en Primera División: para encontrar su último gol en Liga había que remontarse a noviembre de 2016. Desde entonces, una sequía que había provocado su suplencia. En Gijón se reencontró con el gol, cuando más lo necesitaba el equipo y haciendo saltar todo por los aires.

Entró en el 60′ y revolucionó el partido. Sin ir más lejos, anotó un triplete de récord: entre el minuto 79 y el 84 el marcador pasó de 1-1 a 1-4. Tal y como desvelaba Míster Chip, Kevin Gameiro ha anotado uno de los hat-tricks más rápidos de la historia de La Liga, aprovechó una gran asistencia de Griezmann para driblar al portero en el primero, se plantó en el mano a mano ante Cuéllar tras un buen robo de Thomas en el segundo y sentenció aún más el partido con otro derechazo cruzado ante el meta del Sporting.

En un abrir y cerrar de ojos, Kevin lo había resuelto. A la postre, el delantero francés se ha convertido, junto a Griezmann, en el máximo goleador del equipo con 9 tantos. Curiosamente, Gameiro también está entre los máximos asistentes del equipo, ya que ha dado cinco pases de gol, los mismos que Correa y sólo superado por Griezmann. Kevin volvió a sonreír cuando más lo necesitaba el Atlético