Honor a quien honor merece: Sloane Stephens

La victoria de Sloane Stephens en la final de US Open 2017 ante Madison Keys, ha dejado un sin fin de enseñanzas y mil maneras de como sobreponerse ante la adversidad en momentos críticos.

Stephens estuvo más cerca del retiro, que de volver a las canchas. Todo esto se deriva de una lesión que sufrió en su pie que la obligó a estar 11 meses fuera de las pistas. Inclusive, durante el presente año tuvo que someterse a dos cirugías, una en su pie derecho(enero) y la otra en el izquierdo(abril).

A pesar de todo esto, pudo volver a las canchas en Wimbledon, donde perdió en primera ante Alison Riske. Posteriormente, ya recuperada de sus respectivas lesiones, pudo jugar en Washington, donde comenzaría la gira en cemento, pero no tuvo suerte al caer derrotada ante Simona Halep, en primera ronda.

Comienza el resurgir de Stephens en Toronto

Durante el Masters de Toronto, Stephens demostró que se encontraba mejor con su juego, mostraba una mejor condición física y pudo conseguir resultados positivos que iniciaron el despegue de su carrera nuevamente.

En dicho torneo, terminó cayendo en semifinales ante Caroline Wozniacki. Pero lo realmente destacable de su actuación, es que en dicho certamen pudo derrotar a Petra Kvitova (14 del mundo) y a Angelique Kerber (6 del mundo), dos de las mejores jugadoras de la WTA en la actualidad.

Su buen momento continuaría en Cincinnati, donde llegaría nuevamente hasta las semifinales. Pero caería derrotada ante Simona Halep.

La consagración en el US Open y su escalada en el ranking mundial

Stephens llegaba al último Grand Slam de la temporada por debajo de la mesa. Muchos conocían su situación, pero no la colocaban como una de las favoritas para llevarse el torneo.

En primera ronda se cruzaría con la italiana, Roberta Vinci, quien había sido finalista del US Open, hace un par de años atrás. Stephens, la derrotó con contundencia en sets corridos. La primera sorpresa que dio la estadounidense en el torneo, fue en segunda ronda cuando venció a Dominika Cibulková (10 del mundo).

Luego de superar la tercera y cuarta ronda, llegarían los cuartos de final. En dicha instancia pudo vencer a Anastasija Sevastova en tres sets, colocando su nombre en las semifinales. Posteriormente, derrotaría a Serena Williams para pasar a disputar las semifinales del torneo.

Con eso paso de las rondas, iba demostrando que se encontraba en una buena condición y en un buen nivel de tenis. En la final, enfrentó a su amiga, Madison Keys y sorprendentemente la derrotó con una enrome contundencia, 6-3 y 6-0 fueron los parciales en apenas una hora de juego. Stephens, se coronaba así en la primera final del US Open, con participación de jugadoras estadounidense, sin la presencia de las hermanas Williams.

Con la victoria ante Keys, Stephens consigue levantar su primer trofeo de Grand Slam. Un premio enorme luego de haber estado tanto tiempo, fuera de las canchas sufriendo y trabajando para volver a la elite del tenis femenino.

A partir del lunes (mañana), estará estrenando una nueva ubicación dentro del ranking mundial. Estará en el top 20, ocupando la posición 17. Cabe destacar, que antes de su participación en la gira de cemento, ocupa una posición superior a la 900 dentro del ranking.

Conferencia de prensa de Stephens luego de levantar el título