Los Boston Red Sox deben ir a todas por J.D. Martínez

Las reuniones invernales de Grandes Ligas están en pleno apogeo y el toletero J.D. Martínez probablemente será uno de los nombres que más aparezca en las próximas transacciones.

El jardinero es uno de los mejores agentes libres disponibles y podría ganar mucho dinero en su próximo contrato que, según rumores, podría rondar la cifra de los $200 millones de dólares. Tras la llegada de Giancarlo Stanton a los New York Yankees, los Boston Red Sox deben hacer algo al respecto para minimizar el impacto que significa tener al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional 2017 en el archirrival.

Es por ello que analizamos las razones por la cual los Red Sox deben firmar a J.D. Martínez cuanto antes.

Necesitan un gran bate en la alineación

Quizás no es un David Ortiz o un Manny Ramírez, pero J.D. Martínez puede calzar de alguna manera esos pantalones. Cuando los Red Sox necesitaron de un abridor hace algunos años, encontraron a David Price en su “as”. Ahora deben tratar de atraer a Martínez. Tienen el dinero suficiente para hacerse de los servicios de un jardinero que bateó .303 con 45 jonrones y 104 impulsadas con Detroit y Arizona en el 2017.

Fenway Park: Parque amigable para bateadores como J.D. Martínez

De los 45 cuadrangulares que conectó J.D. Martínez este año, 16 de ellos fueron en el Chase Field, hogar de los Arizona Diamondbacks. Imagínense al bateador derecho aprovechando la corta distancia del jardín izquierdo del Fenway Park. Por la raya de la izquierda son 310 pies, quizás 315 con el monstruo verde, además si la conecta por todo el central son 389 pies, mucho menos que los 407 en Arizona. Martínez aprovecharía enormemente estas dimensiones. Recuerden, estuvo en dos parques (Detroit y Arizona) que no son aptos para bateadores de poder.

Uno de los peloteros más completos en las últimas cuatro campañas

Muchos especulan que los Red Sox deberían buscar a Eric Hosmer antes que a J.D. Martínez, sin embargo, la gente obvia que su promedio de bateo es verdadero negocio. Terminó con .300 de promedio en tres de las últimas cuatro temporadas. Entre 2014 y 2017 tuvo una línea ofensiva de .300, 128 cuadrangulares, 350 empujadas y 304 anotadas. Es cierto, se ponchó 560 veces pero eso lo puede tapar si batea de esa manera.

Ética de trabajo

Es posible que en los Red Sox tenga de sobra este aspecto pero el coach de bateo, Dave Magadan, y el manager de los D-Backs, Torey Lovullo, indican que su fortaleza es la dedicación que tiene para trabajar y el ejemplo que eso significa para todos. No será un líder de equipo como Miguel Cabrera en los Tigers o Eric Hosmer en su momento para los Royals, sin embargo, J.D. Martínez es dedicado en su profesión. Y eso le ha servido para marcar diferencias en el mejor béisbol del mundo.