Uno de los puntos más divertidos en el mundo del béisbol son los récords, siempre hay algunos a punto de caer y otros que cambian de dueño de manera constante. Pero también existen los que se ven muy lejanos de romperse y que siendo realistas parece que no se romperán jamás.
Victorias en una temporada
Charles «Old Hoss» Radbourn se convirtió en el único lanzador de su equipo después de que Charlie Sweeney abandonara el equipo. En la temporada de 1884 lanzó 678 2/3 innings en 75 juegos para un récord de 59-12 y 1.38 de efectividad. una cantidad de victorias inalcanzables para un lanzador abridor en estos días.
Jonrones dentro del campo
Sam Crawford lo logró en la temporada de 1901 con los Rojos consiguió 12 cuadrangulares dentro del parque.
Bases por bolas intencionales
Barry Bonds generó tanto respeto en los lanzadores rivales que en algún momento las bases por bolas intencionales se volvieron rutina. Al final de su carrera puso la marca en 668 más del doble del segundo puesto que tiene Albert Pujols con 307.
Juego completo de 58 lanzamientos
Charles «Red» Barret logró su faena en un encuentro que duró una hora y 15 minutos el 10 de agosto de 1944 cuando solo permitió dos hits y promedio dos lanzamientos por rival durante las nueve entradas de trabajo.
134 derrotas
Con un equipo que apenas cumplia con el nivel de Las Mayores, los Cleveland Spiders terminaron con récord de 20-134 (.130), el peor en la historia del béisbol de las Grandes Ligas. Las 101 derrotas en la carretera es una marca que nunca se verá amenazado, porque actualmente los equipos juegan un máximo de 81 encuentros como visitante en la temporada regular.
La racha ganadora más larga de la temporada fue dos juegos, que lograron una vez: del 20 al 21 de mayo. Los oponentes anotaron diez o más carreras 49 veces en 154 juegos. Los lanzadores Jim Hughey (4-30) y Charlie Knepper (4-22) empataron en el liderato del equipo en victorias.