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Epifanía Benítez: La primera dama del fútbol femenino de Paraguay
Trabajadora, humilde, muy humana, cuidadosa de los pequeños detalles y, además, con un amplio recorrido como jugadora y entrenadora en el fútbol femenino paraguayo. Ella es Epifanía Benítez, la primera entrenadora mujer de fútbol de Paraguay a nivel de selecciones.
Benítez tomó el cargo como timonel de las selecciones sub-17 y sub-20 de su país, en marzo de 2017, con un gran reto por delante: no solo continuar con un proceso, sino también clasificar nuevamente a un mundial a una generación que viene trabajando desde hace cinco años: “esta generación parte del 2013 con el profe Carlos Julio Gómez, después con el profe Nelson Basualdo”, aseguró Epifanía.
Una selección que cuenta con muchas jugadoras que tienen un extenso recorrido y que a su corta edad, ya han participado al menos en una ocasión en una Copa Mundial. Quizá la más reconocida es Jessica ‘Pirayu’ Martínez, la referente del equipo guaraní que ya tiene tres mundiales en su historial, dos sub-17 y un sub-20. A ella se le suman, Jessica Sánchez, Fanny Godoy, Lorena Alonso y Heidy Sala, que estuvieron en la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA en Jordania.
A pesar del corto tiempo de trabajo al frente de la selección, la profe ‘Epi’, como se le conoce, ya está dando muestras de su trabajo en el Sudamericano Femenino Sub-20. Las paraguayas finalizaron invictas en la primera fase del campeonato que se juega en Ecuador y se clasificaron a la fase final con unos números incomparables. Cuatro victorias, 15 goles a favor y solo dos en contra.
La selección dirigida por Benítez fue contundente de principio a fin y fue implacable con todos sus rivales. En la primera fecha, las guaraníes golearon 6-1 a Colombia, en ese juego Jessica Martínez empezó a mostrar su casta goleadora, anotando 4 tantos. Contra Ecuador, siguieron marcando diferencia venciendo a las locales 2-0. Perú también fue su víctima cayendo 4-1 y finalizó con un 3-0 frente a Argentina.
La profe Epi
Estudió Ciencias del Deporte en la Universidad Autónoma de Asunción (AUU), y mientras realizaba sus estudios, jugaba para el equipo de la universidad.
En el 2003, estando con la selección mayor de su país, sufrió una lesión en la rodilla que la alejó de las canchas, pero no fue por mucho tiempo. Benítez fue nombrada entrenadora de la categoría juvenil de la UAA para no perder su espacio dentro de la universidad.
“No fue fácil ese momento porque también quería volver a jugar”, recuerda ella.
Estuvo al mando de la categoría juvenil de la UAA desde el 2005 hasta el 2007, siendo este último año el que le daría su primer título como director técnico.
Poco a poco, se empezó a capacitar como entrenadora, pero después regresaron las ganas de volverse a poner los botines. Jugó dos años más hasta que se resignó. Siguió sus estudios como líder de los equipos, y recibió total apoyo de Juan Carlos Orejuela, presidente de la facultad.
En su proceso de capacitación, ella, junto con otra compañera, requerían tener un equipo para hacer las practicas. “Nos acercamos a él (Juan Carlos Orejuela) y le pedimos la categoría juvenil, nos dijo que no había problema”, aseguró la profe «Epi». Aunque no habría pago, no tuvo problemas en aceptar el cargo de entrenadora y empezar a dirigir la categoría juvenil. “Amo lo que hago, me apasiona lo que hago, entonces me dedico el cien por ciento en cada uno de mis trabajos”, agregó emocionada Benítez
Más que una entrenadora
Ella ha tomado sus vivencias como jugadora y su formación como entrenadora como base para poder acercarse a las jugadoras y crear una relación estrecha con cada una de sus dirigidas en la selección guarní.
“Creo que me facilita un poco más porque fui jugadora, sé las necesidades como jugadora, cuáles eran las carencias que se tenía en cuanto acercamiento, afecto y los problemas familiares”, aseguró Benítez.
La profe “Epi” es mucho más que un coach, es como una madre para mucha de ellas. “Yo normalmente tengo una entrevista personal con cada una. Les pregunto cuáles son sus objetivos, sus sueños, sus debilidades, qué les está molestado, cuáles son sus fortalezas”, Recalcó Epifanía.
La ruta al Mundial
Desde Paraguay llegó con la mentalidad de ir paso a paso. Cada partido lo tomó con calma y aunque celebró cada victoria, siempre trató de mantener a su grupo concentrado en el objetivo final; clasificar al Mundial de Francia.
“Tratar de mantener la humildad por sobre todas las cosas. A Jessica Martínez, por ejemplo,en el partido debut metió cuatro goles, la incentivamos, pero le recalcamos que sin el equipo no se hubiese podido logara el objetivo” afirmó la entrenadora.
Paraguay fue arrollador en toda la primera fase, siendo la segunda selección con más goles anotados, y la segunda valla menos vencida.
En la fase final, las albirrojas iniciaron con pie derecho derrotando 3-1 a Venezuela. Su próximo encuentro será el domingo 28 de enero, en el Estadio Bellavista de Ambato a las 7:15 p.m., cuando enfrenten a la Selección Colombia.