Es difícil pensar que hace apenas una semana las dudas persistían en cuanto a si el excepcional japonés Shohei Ohtani sería capaz de tener éxito en Grandes Ligas, basándose en su pobre desempeño durante la primavera. Ahora, la pregunta no es si el fenómeno nipón tiene las facultades necesarias para sobrevivir en el mejor béisbol del mundo, sino si el novato podrá seguir acumulando las hazañas que ha logrado en un período extremadamente corto de tiempo.

Lo que Ohtani ha logrado en su primera semana como ligamayorista ha llamado la atención del mundo del béisbol.

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Como bateador, Ohtani

• Encabezaba las Grandes Ligas en porcentaje de batazos conectados con mayor fuerza (85.7%)

• Había conectado el batazo más duro para un pitcher desde el nacimiento de Statcast™, un sencillo de 112.8 millas por hora contra del derecho Zach McAllister.

• Es el primer lanzador en conectar tres batazos con una velocidad de salida de por lo menos 100 millas por hora en un juego desde que Statcast™ se estableció en el 2015.

Como pitcher, Ohtani

• Había lanzado la segunda recta de cuatro costuras más veloz entre abridores, a 97.9 millas por hora

• La rotación de su bola rápida tiene el promedio de la liga (2219 revoluciones por minuto), que la convierte en una recta sin movimiento

• Había lanzado la recta de dedos separados de mayor velocidad entre los abridores, a 89.3 millas por hora

• Tuvo el tercera mejor proporción de strikes abanicados mediante splitters

La temporada apenas comienza. El excepcional Ohtani sólo ha enfrentado a un equipo como lanzador, y eso no va a cambiar pronto, puesto que volverá a enfrentar a los Atléticos el domingo en Anaheim. Habrá altibajos. La efectividad de 4.50 no importa, al igual que su promedio de bateo de .429.

Sabemos que, la emoción ha sido real y que lo excepcional y las habilidades que vienen con dicha emoción también son reales. Entonces, en algún momento los equipos se ajustarán, en ambos lados de la pelota, y el excepcional Ohtani tendrá que reajustarse.