Se ha convertido en la inevitabilidad en septiembre, los Dodgers de Los Ángeles se apoderan de la División Oeste de la Liga Nacional. Ese momento llegó antes que nunca el martes por la noche, cuando los Dodgers guardaron su séptimo título de división consecutivo.

Walker Buehler el as probable de playoffs dominó a uno de los peores equipos del béisbol y los Dodgers con par de jonrones de Corey Seager ganaron 7-3 en Baltimore.

Los Dodgers, con el mejor récord 94-52 de la Liga Nacional, pueden usar una vez más el resto de septiembre como su laboratorio de prueba hacia los playoffs, probando combos de alineación y agotando un grupo envidiable de novatos para ver cuáles complementan mejor un núcleo que es dos veces ganador del banderín. Integrados por Cody Bellinger, Clayton Kershaw y compañía.

Están buscando su tercer título consecutivo de la Liga Nacional y, en última instancia, su primer campeonato de la Serie Mundial desde 1988.

Se convierten en el tercer equipo en ganar siete o más títulos de división consecutivos, uniéndose a los Yankees de Nueva York (nueve de 1998-2006) y los Bravos de Atlanta (14 de 1991-2005).

Los Dodgers han estado en primer lugar desde el 17 de abril y vieron que su ventaja se hizo tan grande como 21 juegos. Con el favorito de MVP Bellinger liderando la carga, el equipo se jacta de la ofensiva con mayor puntuación de la Liga Nacional y tres jugadores que tienen 30 jonrones.

¿Y ahora?

Los Dodgers tienen 16 juegos para determinar si los novatos como el jugador de cuadro Gavin Lux, quien bateó su primer jonrón de las Grandes Ligas el martes, y los lanzadores Dustin May y Tony Gonsolin se unirán a los incondicionales en la lista de la Serie de División.

Los Dodgers piensan abrir el NLDS el 3 de octubre en el Dodger Stadium, probablemente contra el ganador del juego de comodines. Mientras tanto, la complacencia no debería ser un problema.