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Inició la NBA, la mejor liga del mundo.
Ninguna liga deportiva profesional ofrece drama e intriga como esta, y con la nueva temporada que comenzó, los adictos al baloncesto pronto podrán saciarse.
Como siempre, no faltan historias convincentes.
Milwaukee ha emparejado a Damian Lillard con el dos veces Jugador Más Valioso, Giannis Antetokounmpo, para formar uno de los dúos más potentes de la NBA, mientras que Bradley Beal se une a Kevin Durant y Devin Booker en Phoenix, dándole a los Suns un nuevo y peligroso ‘Big Three’.
Los Warriors han agregado a Chris Paul a su envejecido núcleo de campeonato con la esperanza de perseguir otro título, mientras los Grizzlies pretenden mantenerse a flote hasta que Ja Morant regrese de su suspensión de 25 juegos.
San Antonio está listo para dar rienda suelta al fenómeno francés Victor Wembanyama. Mientras tanto, la situación en Filadelfia parece frágil, con James Harden tratando de salir a la fuerza y el actual MVP Joel Embiid cada vez más impaciente. LeBron James todavía está desafiando el padre tiempo de cara a la temporada número 21 y los Nuggets siguen siendo los campeones defensores, y no hay razón para pensar que Nikola Jokic, Jamal Murray y compañía, no van con todo a por el back-to-back.
Tabla de Contenido:
Los Raptors volando por debajo del radar NBA
Pero se ha hablado muy poco de los Toronto Raptors y sus expectativas para la campaña 2023-24, y no es difícil ver por qué.
Este no es un caso en el que los medios nacionales estadounidenses pasan por alto o faltan el respeto a la franquicia de Canadá: un hilo común entre los equipos Raptors liderados por DeMar DeRozan y Kyle Lowry que superan sus logros, o el club post-campeonato que terminó rompiendo las expectativas a pesar de la marcha de Kawhi Leonard.
Estos Raptors vienen de una temporada completamente aburrida en la que terminaron con un récord de .500, fueron eliminados del torneo de entrada y se perdieron los playoffs por segunda vez en tres años.
Despidieron a su entrenador en jefe y lo reemplazaron con un entrenador relativamente desconocido como Darko Rajakovic. Perdieron a su armador titular en la agencia libre, se poncharon en su búsqueda de Lillard y optaron por no vender sus piezas veteranas, una vez más. Tan buenos como Pascal Siakam y O.G. Anunoby son, y por muy bueno que pueda llegar a ser Scottie Barnes, no tienen ese jugador superestrella innegable que realmente pueda mover la aguja en la NBA.
Como tal, puedes encontrarlos situados hacia el final de la Conferencia Este en la mayoría de los rankings de poder de pretemporada. Su total de victorias proyectado se establece en 36,5, el décimo más alto de los 15 clubes del Este.
Pero tal vez el péndulo ha oscilado demasiado en esa dirección. Los Raptors están siendo infravalorados hasta el punto de que no debería costar mucho superar esas modestas expectativas.
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NBA: ¿Hasta dónde puede llegar este equipo de Toronto?
¿Apostar a que alcancen o superen las 37 victorias? Eso casi parece dinero gratis. Por un lado, Toronto ha superado las victorias en nueve de sus últimas 11 temporadas en la NBA, con la desafortunada campaña de Tampa y la 2022-23 como las únicas excepciones. Pero hay que tener en cuenta que, a pesar de todo lo que salió mal la temporada pasada, lograron ganar 41 partidos.
Ese también es probablemente el resultado más realista para el equipo de esta temporada: rondar la marca de .500 y competir por uno de los últimos lugares en los playoffs en el Este, aunque el mejor de los casos parece mucho más probable que el peor.
El total de victorias proyectado de 36,5 tiene en cuenta la improbable posibilidad de que la directiva opte por deshacerse de algunos o todos sus jugadores veteranos en la fecha límite de cambios y tocar fondo, también conocido como el escenario de hacer tanking.
No es imposible, digamos, si ocurren lesiones o el equipo tiene un comienzo lento: tienen un calendario difícil desde el principio, que incluye seis juegos en nueve días para abrir la temporada. Tal vez tengan la sensación de que uno de sus inminentes agentes libres sin restricciones se está inclinando por irse a otra parte o determinen que volver a contratarlo al costo esperado no es factible y decidan, después de perder a Fred VanVleet, que es mejor obtener algo a cambio que dejarlo. Esos tipos caminan por nada.
NBA: ¿Rebuild, tanking o competir?
¿Pero un derribo total? No contengas la respiración. El presidente de los Raptors, Masai Ujiri, se ha mostrado reacio a reconstruir, como lo ha expresado en múltiples ocasiones, pública y privadamente. Para bien o para mal, sigue predicando la paciencia y no siente la urgencia de elegir definitivamente un camino.
Él cree en este grupo central y cree que están a una pieza de competir, aunque es una pieza bastante importante. Lillard no era ese tipo, como resultó, pero vale la pena señalar que la mayoría de los escenarios comerciales que han explorado seriamente han implicado que adquirieran al mejor jugador del trato, y no al revés. El hecho de que enviaron su selección de primera ronda de 2024 a San Antonio en el intercambio de Jakob Poeltl en febrero pasado también hace que el escenario del tanking sea extremadamente improbable: está entre los seis primeros protegidos, por lo que las cosas tendrían que ir muy mal para que justifiquen tocar fondo esta temporada de la NBA.
En lo que respecta al mejor de los casos, gran parte está ligado a Barnes y su desarrollo continuo. Dado lo similar que es el plantel de la temporada pasada NBA, con fortalezas similares (longitud y versatilidad defensiva, las principales), debilidades (tiros) y signos de interrogación (ataque en el mid-range), confían en el crecimiento interno para mejorar como equipo, dado que sus jugadores principales están en su mejor momento o cerca de ellos, la parte trasera de la plantilla está formada principalmente por veteranos, y no se espera que su jugador más joven (el novato Gradey Dick, de 19 años) comience la temporada en la rotación.
Barnes es el gran factor X para una inflexión de los Raptors en 2023-24 (y más allá).
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Todos los caminos pasan por Scottie Barnes
Su excelente training camp es un comienzo alentador. Como de costumbre, toma el éxito o el fracaso de la pretemporada con un grano de sal: «No significa nada en absoluto», contundente Scottie.
Hace un año, Barnes llegó al campamento golpeado y no exactamente en perfecta forma física. Continuaría teniendo una pretemporada decepcionante, que finalmente lo llevó a una temporada de segundo año sólida pero nada espectacular; decepcionante en relación con las elevadas expectativas que surgieron de su impresionante campaña de Novato del Año.
Según todos los indicios, Barnes tuvo un gran verano. Se hizo más fuerte, ganó nueve libras de músculo y se comprometió a mejorar su acondicionamiento. En lugar de tener fuertes “ráfagas o momentos (al final de los juegos)”, como él dice, su esperanza es estar mejor preparado para dominar de principio a fin y en el transcurso de una larga temporada.
No es difícil imaginar al joven de 22 años dando un salto en su tercera temporada en la NBA, y si él puede dar un paso adelante, también pueden hacerlo los Raptors, y cuanto mayor sea el paso, mejor.
NBA: Darko Rajakovic espera cambiarle la cara a los Raptors
A partir de ahí, la esperanza es que algo de nueva energía y mejores vibraciones puedan ayudar a lograr más juegos en la columna de victorias al final de la temporada NBA. Una vez más, se aplican las advertencias estándar de pretemporada, pero Rajakovic y su cuerpo técnico parecen haber traído consigo una energía renovada, y los jugadores parecen aceptar su nuevo sistema en ambos extremos de la cancha.
Después de tomar desprevenidos a los oponentes con su longitud y sus ingeniosos esquemas defensivos hace un par de años, en camino a una grata y sorprendente marca de victorias de 48 en 2021-22, los equipos estaban mejor preparados para sacarlos de su zona de confort la temporada pasada.
Con su “ofensiva 0,5”, basada en el movimiento del balón y la rápida toma de decisiones, Rajakovic espera que sean un poco menos predecibles. Al menos, debería crear un estilo de juego más agradable desde el punto de vista estético.
«Creo que vamos a sorprender a mucha gente esta temporada, simplemente con la forma en que jugamos», dijo Precious Achiuwa.
«Parece que el mundo exterior tiene sus expectativas», dijo Rajakovic. “Pero esa es la belleza del negocio en el que vivimos. No debemos permitir que el mundo exterior dicte cómo hacemos el negocio, cómo nos preparamos y cómo nos preparamos para la temporada. Por lo tanto, definitivamente no nos estamos preparando para tener un desempeño inferior. Definitivamente estamos trabajando mucho y haciendo todo lo que está a nuestro alcance para preparar a nuestro equipo para ser el mejor”.
¿Y si la gente –o, mejor aún, los equipos de la NBA– los subestiman? Pues perfecto. Quizás tenga algún valor tomar a la gente con la guardia baja. Ciertamente, se puede obtener cierta satisfacción al demostrar que están equivocados, y eso es lo que se proponen hacer estos Raptors esta temporada.
«Me encanta cuando la gente no cree en ti», dijo Schroder. “He pasado por eso toda mi vida. No tenemos nada que perder”.
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